El docente Carlos Lagos, quien imparte en curso Track Inteligencia Artificial en Acción: Potencia tu Emprendimiento con IA, tuvo la oportunidad de participar como coach del equipo nacional de robótica en el prestigioso All Japan Micromouse Contest, una de las competencias tecnológicas más relevantes a nivel mundial.

Para Lagos, esta instancia significó un importante aprendizaje tanto en lo personal como en lo profesional. «Poder interactuar, conectar y compartir ideas con el equipo sin duda es una experiencia enriquecedora. Soy fiel creyente de que uno, independiente de la posición o el tiempo, siempre sigue aprendiendo».

Desafíos y aprendizajes
En el proceso previo a la competencia existió la incertidumbre. «Costó conseguir recursos para viajar, lo que generó dudas hasta último minuto sobre nuestra participación», comentó. No obstante, la experiencia permitió fortalecer la capacidad de gestión y vinculación con otras instituciones y empresas. «La empresa Rimval fue nuestro principal sponsor privado y la UBB el sponsor académico de los estudiantes, así como otras (empresas) que apoyaron en distintos segmentos como AllMerch, Wow sushi y REBOT», destacó el docente.

La participación en este certamen tiene un fuerte vínculo con su asignatura en la UDD, donde enseña a sus estudiantes a integrar inteligencia artificial en sus proyectos. «Esto se relaciona directo en mi rol emprendedor, ya que mi empresa REBOT, fue uno de los partner y sponsor impulsores del equipo para llegar a Japón, donde los conocimientos ligados al levantamiento de recursos y vinculación con el medio fueron clave para llegar al país», sostuvo.

Asimismo, la inteligencia artificial jugó un rol clave en la competencia y en su experiencia en Japón. «La IA me permitió establecer diálogos de manera eficiente, mejorar mi propuesta de servicios (con el fin de forjar alianzas estratégicas con empresas japonesas) y generar adaptaciones a mi idea y oferta considerando el perfil que me estaba enfrentando allá», concluyó.

La participación del equipo chileno en el All Japan Micromouse Contest marca un hito en la integración de la robótica y la inteligencia artificial en la formación profesional, abriendo nuevas oportunidades para la innovación y la colaboración internacional.